Depósito de Aire Comprimido |
Los depósitos aportan a la instalación varios efectos beneficiosos:
- Compensa las oscilaciones de presión en la red, más acusadas en el caso de los compresores de émbolo.
- Permiten tiempos de descanso en el compresor, mejorando su equilibrio térmico y su vida útil.
- Facilita el enfriamiento de aire procedente del compresor. Su tamaño influye en ese enfriamiento y con ello en la cantidad de agua retenida.
- Retiene impurezas procedentes del compresor, por lo que puede ser considerado un primer filtro de línea.
Todo depósito destinado a almacenar aire a presión debería ir equipado con:
- Válvula de seguridad
- Presostato de máxima-mínima presión para el control del compresor
- Manómetro (Termómetro opcional)
- Válvula de cierre
- Grifo de purga para eliminar el agua
- Compuerta de limpieza